Bob Dylan y el cine

Bob Dylan

     El próximo 11 de Septiembre verá la luz el nuevo trabajo de Bob Dylan, Tempest, justo 50 años después de su primer álbum ("Bob Dylan", 1962). La trayectoria de esta peculiar figura de la música del siglo XX, cuya trascendecia e influencia han alcanzado cotas inimaginables, ha sido larguísima, con grandes cambios, altibajos, sorpresas, pero sobre todo, con grandes aportaciones a la música universal.

Tal transcendencia no ha sido ignorada por la industria del cine, que ha fijado sus ojos repetidas ocasiones en este controvertido personaje. Hay una cantidad considerable de películas y documentales centrados en Bob Dylan (incluso él mismo rodó su propia película, Renaldo y Clara, un rarísimo film de corte experimental de casi cuatro horas que fue apaleado por la crítica, precipitando su retirada de los cines), de las cuales he escogido tres sobre las que hablar, las que creo más relevantes.

DONT LOOK BACK, de D.A. PANNEBAKER (1967)

Este documental fue el primero que se centró en la figura del artista, al que sigue durante toda su gira británica durante la primavera de 1965. La cámara sigue a Dylan día y noche, y recoge momentos imperdibles de su intimidad, de su relación con los fans y de sus encontronazos con la prensa.
En ciertos momentos, uno puede incluso dudar de si lo que está viendo es real o simple ficción: lo extravagante y absurdo de ciertas situaciones en las que se ven envueltos Dylan y compañía hacen pensar que están preparadas. Nada más lejos de la realidad. Todo está filmado tal como es; todo un mérito de D.A. Pannebaker, cuya carrera posterior como documentalista musical dejó perlas como Ziggy Stardust de David Bowie.
Momentos remarcables: la tremenda bronca al periodista de Times, la discusión absurda con el molesto falso periodista que resulta ser estudiante de ciencias, el encuentro con el cantante Donovan, la negociación del mánager de Dylan con el agente musical Tito Burns, las canciones con Joan Baez, las actuaciones, y un larguísimo etcétera.

Y por supuesto, el que se considera como uno de los primeros videoclips de la historia, el de "Subterranean Homesick Blues"

NO DIRECTION HOME de MARTIN SCORSESE (2005)

 

Otro documental, dirigido por el legendario Martin Scorsese, que recoge toneladas y toneladas de material inédito de archivo, de entrevistas y testimonios que cubren parte de la carrera de Dylan, desde sus comienzos hasta el misterioso accidente motorístico del cantante en 1966.
En sus cerca de tres horas, podemos escuchar cómo cantaba Dylan en el instituto, sus primeras demos y actuaciones.Vemos sus primeras influencias: cantantes de folk y country como su idolatrado Woody Guthrie, al que se dispuso a visitar cuando se encontraba en su lecho de muerte, olvidado en un hospital de Queens.
Numerosas personalidades intelectuales de la época relatan cómo conocieron a Dylan, cuando todavía era un chaval del Medio Oeste llegado a Nueva York a conocer los ambientes donde se cocía la cultura del folk, cómo consiguió su primer contrato discográfico y se le llegó a conocer como "la voz de su generación".
La segunda parte del documental se centra en su desencanto con el mundo del folk, y su conversión al rock, con la incorporación de una banda de blues que le acompañaba en sus conciertos, hecho que fue considerado como una "traición" por sus fans. Las múltiples reacciones a este súbito cambio son fielmente documentadas, y el mismo Dylan habla de ello.
En definitiva, es un documental completísimo, que contiene material interesante y entrevistas reveladoras, recomendado para cualquiera que quiera acercarse al célebre músico.

(Uno extracto del documental, y uno de sus momentos más famosos. Durante una actuacion, un miembro del público llama "Judas" a Dylan)

I'M NOT THERE de TODD HAYNES (2007)

 

 Es la única película de ficción de las tres que he escogido. No se trata de un simple "biopic" al uso, sino, más bien, de una colección de historias distintas que, de alguna manera, representan diferentes etapas vitales de Bob Dylan, aunque no se correspondan para nada con la realidad. Al inicio de la cinta podemos leer: "Inspirado por las canciones y las muchas vidas de Bob Dylan"
Así pues, seis historias distintas centradas en la vida de seis personajes distintos conforman la película. Las historias se entretejen a lo largo del metraje y se complementan las unas a las otras.

Woody Guthrie (Marcus Carl Franklin) es un chaval afroamericano de 11 años que toca la guitarra y canta, que viaja por el país persiguiendo su sueño de convertirse en un cantante reconocido.

Jack Rollins (Christian Bale) es un cantante de folk de éxito, reconocido como "la voz de su generación", y que está harto de que se le etiquete como tal. Llegado a cierto punto, Jack se convierte al cristianismo, haciéndose pastor evangélico.

Robbie Clark (Heath Ledger) es un famoso y reputado actor, casado con una artista francesa, que atraviesa problemas matrimoniales y profesionales.

Jude Quinn (Cate Blanchett) es un cantante folk que "traiciona" a sus fans al cambiarse al rock. Su historia es la que más recuerda a Dylan, en su período 65-67.

Billie The Kid (Richard Gere), el forajido, se ve obligado a salir de su retiro en el campo para salvar a la ciudad de Riddle de su destrucción a manos de su enemigo Pat Garrett.

Arthur Rimbaud (Ben Wishaw) es un misterioso joven que comparte nombre con el poeta del siglo XIX. Sólo le vemos en una sala de interrogatorio dando respuestas ambiguas a preguntas formuladas por unos interrogadores que no aparecen en ningún momento.

La película combina estéticas muy distintas y contiene una excelente banda sonora compuesta únicamente de canciones de Dylan, interpretadas algunas de ellas por otros artistas.
Cabe destacar la enorme actuación de Cate Blanchett, interpretando a un Dylan excéntrico en la cumbre de su fama. El resto de interpretaciones son también geniales y llenas de matices.
Fue ganadora de numerosos premios y nominada al Óscar. Es una película imprescindible para conocer más sobre la figura y la música de Bob Dylan.