Eón XXI
"Vaya, se nos ha fundido la bombilla de sótano. Ahora nos harán trabajar el doble para cubrir el imperfecto."
Concurso de la UPM
Hoy, os traigo la página de un concurso en el que estamos participando algunos de los creadores de Eón XXI. Consiste en crear una aplicación para coches conectados a internet. Aqui podeis ver nuestro resumen y si quereis también podeis votar por él en facebook. Os seguiremos informando.
"Misery", la pesadilla de cualquier escritor
La escritura de Misery arranca a mediados de los ochenta y tiene que ver con una extraña pesadilla que Stephen King sufrió mientras viajaba de Estados Unidos a Londres con la compañía American Airlines, en un viaje de negocios y a la vez de turismo. King escribió todo lo que recordaba del sueño en una servilleta de papel a bordo del avión y se la guardó para trabajar en la idea en cuanto volviese a casa. Sin embargo, cuando llegó a Londres la pesadilla no se le iba de la cabeza, así que se levantó de la cama y se dirigió a la recepción del hotel en el que se hospedaba. El conserje le contó que disponía de un escritorio muy especial, pues había pertenecido a Rudyard Kipling. Allí King pudo escribir 16 páginas que resumían con más detalle que la servilleta la esencia de la obra.
La parte más dura del trabajo ya estaba hecha cuando volvió a Maine, así que tardó poco en terminar su novela. No sin antes tener un pequeño conflicto con la editorial, cuando el autor comunicó su deseo de que la obra fuera publicada bajo uno de sus pseudónimos (Richard Bachman), sus editores consiguieron convencerle de lo contrario, pues consideraban Misery como una de sus obras más potentes. Aunque, más que convencerle, lo que sucedió es que alguien filtró quien era en realidad Richard Bachman y las ventas de los libros publicados por éste se multiplicaron por diez, así que al final King decidió publicarlo con su propio nombre, ya que seguir usando un pseudónimo era absurdo. Así que el 8 de junio de 1987 se publicaba Misery.
Próximamente me gustaría hablar acerca del rodaje de la película, ya que el éxito cosechado con el libro dio pie a una adaptación cinematográfica.
La verdadera historia de Caperucita Roja
¿Alguna vez habéis oído hablar de la verdadera historia de Caperucita Roja? La versión más conocida de la historia es la difundida por los hermanos Grimm y la que la mayor parte de la gente conocemos.
Caperucita Roja es una niña que tiene que llevarle comida a su abuela que en medio del bosque. En el camino, se encuentra con un lobo que la reta a ver quién llega antes a casa de la abuelita, Caperucita, sin saberlo, sigue el camino largo. El lobo llega antes, se come a la abuelita y se viste con su camisón. Al llegar Caperucita, el lobo la engaña e intenta comérsela pero, Caperucita chilla y un cazador la oye. Al final, el cazador mata al lobo y milagrosamente consiguen salvar a la abuelita.
La historia inicial fue escrita por Charles Perrault, en 1697, tras escucharlo de boca de la niñera de su hijo. En esta versión, Caperucita era ingerida por el lobo y no aparecía ningún cazador. Además, suprimió la parte en la que el lobo invita a Caperucita a consumir carne y sangre pertenecientes a la abuela, antes de comérsela a ella. Perrault quiso que su cuento tuviese moraleja, por eso contaba con este final trágico que enseñaba a no confiar en extraños.
¿Cómo reescribieron los hermanos Grimm esta historia?
Se cree que el cuento llegó a Alemania a través de familias que huyeron de Francia en la época de Luis XIV. Estas familias fueron transmitiéndolo de generación en generación, hasta que llegó a una chica amiga de los hermanos Grimm. Estos, al escuchar la historia decidieron cambiar el final para que tuviese un final feliz, tal y cómo solían tener los cuentos de la época.
Para terminar aquí os dejo los dos finales, primero el de Perrault:
"Caperucita Roja se desviste y se mete a la cama y quedó muy asombrada al ver la forma de su abuela en camisa de dormir. Ella le dijo:
-Abuela, ¡qué brazos tan grandes tienes!
-Es para abrazarte mejor, hija mía.
-Abuela, ¡qué piernas tan grandes tiene!
-Es para correr mejor, hija mía.
Abuela, ¡qué orejas tan grandes tiene!
-Es para oírte mejor, hija mía.
-Abuela, ¡qué ojos tan grandes tiene!
-Es para verte mejor, hija mía.
-Abuela, ¡qué dientes tan grandes tiene!
-¡Para comerte mejor!
Y diciendo estas palabras, este lobo malo se abalanzó sobre Caperucita Roja y se la comió."
Y el de los hermanos Grimm:
"- ¡Buenos días! - pero no obtuvo respuesta. Se acercó a la cama, descorrió las cortinas y vio a la abuela, hundida la cofia de modo que le tapaba casi toda la cara y con un aspecto muy extraño.- ¡Ay, abuelita! ¡Qué orejas más grandes tienes!- Son para oírte mejor.- ¡Ay, abuelita, vaya manos tan grandes que tienes!- Son para cogerte mejor.- ¡Pero, abuelita! ¡Qué boca más terriblemente grande!- ¡Es para tragarte mejor!Y, diciendo esto, el lobo saltó de la cama y se tragó a la pobre Caperucita Roja. Cuando el mal bicho estuvo harto, se metió nuevamente en la cama y se quedó dormido, roncando ruidosamente.He aquí que acertó a pasar por allí el cazador, el cual pensó. «¡Caramba, cómo ronca la anciana! ¡Voy a entrar, no fuera que le ocurriese algo!». Entró en el cuarto y, al acercarse a la cama, vio al lobo que dormía en ella.- ¡Ajá! ¡Por fin te encuentro, viejo bribón! - exclamó -. ¡No llevo poco tiempo buscándote!Y se disponía ya a dispararle un tiro, cuando se le ocurrió que tal vez la fiera habría devorado a la abuelita y que quizás estuviese aún a tiempo de salvarla. Dejó, pues, la escopeta, y, con unas tijeras, se puso a abrir la barriga de la fiera dormida. A los primeros tijerazos, vio brillar la caperucita roja, y poco después saltó fuera la niña, exclamando: - ¡Ay, qué susto he pasado! ¡Y qué oscuridad en el vientre del lobo!A continuación salió también la abuelita, viva aún, aunque casi ahogada. Caperucita Roja corrió a buscar gruesas piedras, y con ellas llenaron la barriga del lobo. Éste, al despertarse, trató de escapar; pero las piedras pesaban tanto, que cayó al suelo muerto.Los tres estaban la mar de contentos. El cazador despellejó al lobo y se marchó con la piel; la abuelita se comió el pastel, se bebió el vino que Caperucita le había traído y se sintió muy restablecida. Y, entretanto, la niña pensaba: «Nunca más, cuando vaya sola, me apartaré del camino desobedeciendo a mi madre».Y cuentan también que otro día que Caperucita llevó un asado a su anciana abuelita, un lobo intentó de nuevo desviarla de su camino. Mas la niña se guardó muy bien de hacerlo y siguió derechita, y luego contó a la abuela que se había encontrado con el lobo, el cual le había dado los buenos días, pero mirándola con unos ojos muy aviesos.- A buen seguro que si no llegamos a estar en pleno camino, me devora.- Ven - dijo la abuelita -, cerraremos la puerta bien, para que no pueda entrar.No tardó mucho tiempo en presentarse el muy bribonazo, gritando: - Ábreme, abuelita; soy Caperucita Roja, que te traigo asado.Pero las dos se estuvieron calladas, sin abrir. El lobo dio varias vueltas a la casa y, al fin, se subió de un brinco al tejado, dispuesto a aguardar a que la niña saliese al anochecer, para volver a casa; entonces la seguiría disimuladamente y la devoraría en la oscuridad. Pero la abuelita le adivinó las intenciones. He aquí que delante de la casa había una gran artesa de piedra y la anciana dijo a la pequeña: - Coge el cubo, Caperucita; ayer cocí salchichas, ve a verter el agua en que las cocí.Hízolo así Caperucita, y repitió el viaje hasta que la artesa, estuvo llena. El olor de las salchichas subió hasta el olfato del lobo, que se puso a husmear y a mirar abajo hasta que al fin, alargó tanto el cuello, que perdió el equilibrio, resbaló del tejado, cayó de lleno en la gran artesa, y se ahogó. Caperucita se volvió tranquilamente a casita sin que nadie le tocase ni un pelo."
Como habéis podido comprobar por vosotros mismos, el cuento tiene dos finales totalmente diferentes.
Como habéis podido comprobar por vosotros mismos, el cuento tiene dos finales totalmente diferentes.
Probabilidad y cumpleaños
Hoy os traigo una curiosidad matemática relacionada con la probabilidad y la combinatoria. ¿Alguna vez habéis oido que la probabilidad de que dos personas cumplan años el mismo día en un conjunto de, por ejemplo, 30 personas es considerablemente más alta que la probabilidad de que ninguno coinicida?
Al leer esto cualquier persona puede pensar que es imposible que en una reunión de 30 personas haya dos que coinicidan en sus cumpleaños, pero como vamos a comprobar, hay una probabilidad bastante alta.
Primero, vamos a ordenar a las 30 personas en una fila. Vamos a ver, cuál sería la probabilidad de que ninguno coincidiese con otro. Para ello, el primero de la fila tendría 365 días (obviamos el 29 de febrero por darse sólo cada cuatro años) en los que podría cumplir años. El segundo, podría cumplir años cualquier día del año exceptuando el día en el que cumpliese el primero, por tanto el segundo tendría 364 posibilidades. Así, sucesivamente con todos, el tercero tendría 363 posibilidades, el cuarto, 364...De esta manera, llegariamos al último que tendría 336 posibilidades.
365 x 364 x...x 336
El resultado de esta multiplicación es el número de casos favorables. Para saber, el total de casos tendriamos que ver que cualquiera puede cumplir años independientemente del día que lo cumplan los demás, con lo cual cada uno tendría 365 posibilidades para su cumpleaños. Por lo que el número de casos totales, independientemente del cumpleaños de los demás, sería 365^30. Ahora, dividiendo el número de casos favorables entre el número de casos totales obtenemos la probabilidad de que no haya dos personas que cumplan años el mismo día:
365×364×363×⋯×336365n≈0,2937,
así que la probabilidad de que 2 personas no coinicidan en su cumpleaños es del 29,37%. Ahora, con ese número podemos averiguar la probabilidad que buscabamos, es decir, 100% - 29,37% = 70,63%. Como podemos ver, es mucho más probable que dos personas coincidan, cuantas más personas haya, más probabilidad habrá de que existan dos que cumplan años el mismo día.
Y con todo este razonamiento, se demuestra algo que a primera vista parecía prácticamente imposible.
Peces abisales de Groenlandia
Hace tiempo, National Geographic reveló imágenes de algunas de las criaturas que se descubrieron hace relativamente poco en Groenlandia. Diez de estas especies eran desconocidas para la ciencia, pero el hecho de descubrir estos peces en aguas con temperaturas que hasta hace poco eran demasiado frías para que pudieran sobrevivir hace de esto algo asombroso. Me gustaría mostraros tres de estos peces que me han llamado mucho la atención:
Esta fotografía muestra a una hembra adulta del primer pez, la diferencia de sexos en este animal es muy notoria. La hembra es mucho más grande, y el macho se pega al cuerpo de esta para que le alimente (algo así como un parásito). La función del macho es fertilizar los huevos de la hembra.
Conocido por el nombre de tiburón gato, se le situaba en distintas partes del mundo, pero el descubrimiento en las zonas abisales de Groenlandia demuestra que ha habido un aumento de la fauna en las profundidades del océano debido al cambio climático.
Llamado Chaenophryne
longiceps, se desconocía por completo que pudiesen habitar en las aguas frías
de Groenlandia. Pertenece a la familia de los rape. Su longitud es de 17 centímetros .
Conocido por el nombre de tiburón gato, se le situaba en distintas partes del mundo, pero el descubrimiento en las zonas abisales de Groenlandia demuestra que ha habido un aumento de la fauna en las profundidades del océano debido al cambio climático.
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